Dos profesionales estadounidenses pasaron años haciéndose pasar por mujeres negras. Mintieron sobre sus orígenes. Es una situación en la que, seguramente, hay muchas personas más.
Tegucigalpa, Honduras 17 de septiembre de 2020.- Jessica A. Krug y Rachel Dolezal, probablemente no se conozcan, pero en algo coinciden y es un motivo por el cual han trascendido como casos extraños o cuando menos, no comunes. Ambas son blancas, pero se hicieron pasar por mujeres negras.
En diferentes momentos, la prensa de los Estados Unidos han hecho eco de la rocambolesca historia de estas dos féminas y no es para menos, acontece en un país con permanentes tensiones raciales y en el que, a juzgar por los hechos, aparentemente a nadie se le ocurriría convertirse en negra o negro.
Jessica A. Krug
Efectivamente, Jessica A. Krug, de 38 años, pasó décadas presentándose como afrocaribeña. Su historia incluía que había crecido en el Bronx. No siendo suficiente, remarcó que sus padres eran drogadictos y su hermano, una de las tantas víctimas de la brutalidad policial. ¿Es creíble? Parece que sí.
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}Lo que viene es lo mejor, el pasado 3 de septiembre, Jessica A. Krug, profesora de Historia Latinoamericana y Africana de la Universidad George Washington de la capital estadounidense, confesó que no es quien ha dicho ser.
Así lo reveló en un texto titulado «La verdad y la violencia contra los negros de mis mentiras». Siendo adolescente, inventó que era negra y su lugar de origen lo cambió varias veces. No creció en Nueva York sino que era una blanca judía que creció en los suburbios de Kansas City.

Tras pedir perdón a quienes engañó, dijo que ellos no eran personas ingenuas, sino que ella tuvo capacidad para articular una historia realmente creíble. Krug fue suspendida de su empleo al no más confesar su verdad.
Al explicar lo hecho, Krug lo atribuye a problemas mentales. Los profesionales que la ayudan “tan tarde” le han dicho, que la apropiación de falsas identidades es una respuesta a los traumas que marcaron su niñez.
Sin embargo, defiende que no quiere justificarse y que debe ser cancelada. “Las comunidades negras no tienen la obligación de albergar los desechos de las sociedades no negras. He hecho esto. Sé que está mal y lo he hecho de todos modos”, escribió.

Rachel Dolezal
Otro de los casos, ampliamente conocidos es el de Rachel Dolezal, una mujer que se identificaba como negra y que llegó a presidir la sección local en Spokane (Washington) de la Asociación Nacional para el Progreso de las Personas de Color, la NAACP.
La NAACP es la principal organización en favor de los derechos civiles de Estados Unidos y Dolezal estuvo ahí durante más de un año. En junio de 2015 sus padres reconocieron que nació blanca y que se había hecho pasar por negra. Luego de esto, dimitió
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